¿Eres un comprador compulsivo?

Conoce-un-poco-sobre-la-experiencia-del-Buen-Fin-en-UTEL| Blog - UTEL

Parece algo divertido y gracioso, pero para muchas personas comprar es algo más que un placer o satisfacer una necesidad: es una compulsión y una adicción.

El concepto de comprador compulsivo se aplica a la persona que actúa inducida por un impulso incontrolable y es un síndrome en el cual no se puede evitar comprar cosas aunque no se necesiten.

Es decir, un comprador normal siente cierto placer al adquirir aquello que desea y por tal motivo se siente satisfecho; sin embargo, el comprador compulsivo no se conforma con nada y siempre querrá seguir adquiriendo más cosas sin ponerse límites sobre sus gastos. Este síndrome afecta con mayor medida a las personas deprimidas y con baja autoestima.

¿Cómo puede esta situación, perjudicar tu vida?

Pues bien, esta enfermedad causa problemas personales, familiares y hasta laborales, ya que al tratarse de una persona con una gran insatisfacción consigo misma, busca llenar ese vacío con esta actividad que le genera satisfacción aunque sea pasajera, que va desde la euforia al comprar, a la culpa y la tristeza al llegar a casa, causando un descontrol en las deudas, que pone en peligro la estabilidad financiera, además de la emocional y familiar, y aun así no poder dejar de usar la tarjeta de crédito.

Este trastorno puede llegar a atenderse profesionalmente, para el cual hay tres tratamientos, que son la psicoterapia, por medicación y ambas, pero para evitar llegar a ese extremo hay algunos consejos para dejar de ser uno de ellos:

• Lo más importante es aprender a poner límites y a decir que no a tiempo, evitando caer en las ofertas y descuentos atractivos.

•Crear una lista de lo que se necesita y procurar cumplirla, poniendo un límite de dinero sin sobrepasar los ingresos.

• Hacer juegos mentales respecto al dinero gastado, es decir, ‘’si gasto esto hoy, ¿qué consecuencias traería mañana?’’, ‘’¿qué pasaría si no lo gasto?’’, etc.

• Cargar solo dinero en efectivo, evitando llevar las tarjetas de crédito.

• No ir de compras solo, sino acompañado de alguien que evite compras innecesarias.

• En el último de los casos, busca ayuda profesional.

¿Cómo identificar si padeces de este trastorno?

• Salgo de compras cada semana
• Compro cosas que no necesito
• No pienso a la hora de comprar
• Me dejo llevar por las ofertas y promociones
• Comprar me crea una satisfacción
• Cuando compro demasiado no lo comento con mi familia
• Casi siempre que realizo una compra me arrepiento

Si en más de 5 de estos anteriores casos te identificaste, es posible que sufras de los síntomas de la compra compulsiva, así que ya sabes que es lo que tienes que hacer para evitar serlo y llegar a un problema mucho más grave.

Y tú ¿eres un comprador compulsivo?.

Iván Mendoza

Utel Editorial


Universidad Mexico