Cuando se establece una meta como parte del plan de vida, existe mayor consciencia de las decisiones que se toman y es más fácil disfrutar de los aciertos, ya que cada paso exitoso se celebra como un logro. También es común que si algo no sale como se esperaba, aparezcan emociones complicadas como frustración, miedo o enojo, experimentando distrés o comúnmente denominado como estrés “negativo”. Por eso, es importante conocer lo que es la resiliencia.
Cuando un individuo se encuentra ante ciertas dificultades, experimentará mayor afectación en su bienestar y alcance de metas. Gómez, et. al. (2018) realizaron un estudio con el propósito de conocer la relación entre la resiliencia, estrategias de afrontamiento y distrés psicológico.
En este estudio se evaluaron estudiantes universitarios a distancia y encontraron que a mayor índice de distrés psicológico, habría menor resiliencia y mayor despliegue en estrategias basadas en la evitación del problema, autocrítica, pensamientos enfocados en ilusiones y fantasías así como el aislamiento social.
De esta manera, se puede ver que bajo dichas condiciones existe mayor probabilidad de fracasar en tus estudios si no se le concede un espacio al manejo de emociones y solución de problemas. Como lo mencionan los mismos autores: “El afrontamiento de aproximación se focaliza en el problema y refleja los esfuerzos cognitivos y conductuales para manejar o resolver los estresores vitales. En cambio, el afrontamiento por evitación tiende a estar centrado en una emoción; refleja intentos cognitivos y conductuales para evitar pensar en un estresor y sus implicaciones, y así poder manejar el afecto asociado al mismo.” (Beasley, Thompson y Davidson, citado en Gómez et. al, 2018, p.28)
Los logros y las emociones
Es natural sentir emoción cuando hay algo valioso (según el punto de vista de cada uno) en medio de una situación, por lo que hablar de logros también nos lleva a hablar de obstáculos. Es importante reconocer las dificultades para hacerles frente y resolverlas; de esta manera, las emociones nos ayudan a dirigir la atención a ello.
Reconocer una emoción e identificar ese aspecto significativo que se encuentra involucrado en el problema es el primer paso para hacerle frente a una situación.
Una vez identificada la situación se puede seguir con los siguientes pasos:
- Apertura: mantenerte en la situación a pesar del malestar emocional, reconociendo lo que sucede alrededor de ti (situación), así como lo que te sucede a ti (pensamientos y emociones).
- Consciencia: describir para uno mismo la situación presente separando casos hipotéticos y eventos pasados de la realidad actual.
- Compromiso: identifica lo que es importante para ti y actúa de acuerdo a aquello que te ayude a saber cómo alcanzar una meta, no de acuerdo a lo que evite sentir la emoción. Se puede logar obteniendo información para tomar decisiones conscientes, desarrollar nuevas habilidades para responder de diversas maneras a un problema y pedir ayuda para resolver parte de la situación o regular las emociones y calmar conductas impulsivas como abandonar un proyecto.
Considerando que las metas personales tienen un significado propio que le otorga valor, es importante detectar cuando las cosas se están complicando, para así buscar soluciones y actuar con compromiso sin poner en riesgo esa meta con decisiones impulsivas; evitar situaciones contribuye a eliminar el malestar de manera inmediata, pero seguirá apareciendo y además, nos impedirá continuar con nuestros planes, pues cuando se evita una emoción también se evita prestar atención a la meta involucrada.
Referencias:
Gómez, A., Rodríguez, A. y Rivera, J. (2018) Distrés psicológico, resiliencia y estrategias de afrontamiento en estudiantes universitarios del sistema a distancia. Journal of Behavior, Health & Social Issues, 10(1), 27-36. DOI: http://dx.doi.org/10.22201/fesi.20070780.2017.9.2.68380
Psic. Ángeles Reyes Cortés
Orientación Psicológica
Programa de Éxito Académico y Profesional (PEAP)
